El Peaky Blinder y Karina Milei apuntan contra “Toto” y Posse
A La Libertad Avanza se le terminó la luna de miel y los conflictos internos empiezan a florecer cada vez más fuertes. El ministro endeudador, Luis Caputo, sabe que Javier Milei le está preparando el reemplazo y está tratando de resistir la embestida a base de insultos y amenazas a todos aquellos que no hacen lo que él quiere.
Lo cierto es que la plata no aparece, el alineamiento a Isreal y Taiwan aleja a los árabes y los chinos, mientras que el FMI y el resto de bancos internacionales ya no prestan más, y esto hizo que el Presidente le reclarama al ministro no haber cumplido con la promesa de conseguir 15 millones de dólares para levantar el cepo y así poder avanzar en una economía liberada.
A su vez, la estrategia del superávit a través de postergar pagos estalló en la cara de Caputo cuando las energéticas rechazaron el bono propuesto por el ministro para saldar la deuda acumulada, lo que provocó un arrebato de emoción violenta, donde Caputo arremetió contra ellos y en privado los acusa de ladrones y amenaza con destruirlos.
La misma furia se dirige hacia las Pymes, a las que culpa por no bajar los precios: “Los voy a fundir, los voy a tapar de importaciones chinas”. Pero detrás de estas explosiones emocionales se oculta una inestabilidad más profunda, Caputo se entera de los planes de Milei para su reemplazo mientras la falta de un plan de estabilización económica efectivo comienza a notarse y la incertidumbre sobre el futuro económico del país se agudiza.
Pero las tensiones no se limitan solamente al ámbito económico. La lucha interna en la cúpula del poder se intensifica, con dos grupos de operadores enfrentados en la administración de fondos públicos y compromisos políticos y empresariales.
Cuando la primera dama Karina Milei y el asesor estrella Santiago Caputo quieren “hacer política” e intentan acceder a fondos se topan con obstáculos controlados por el jefe de Gabinete, Nicolás Posse. La situación se complicó aún más cuando descubrieron un eje entre “Toto” Caputo y Posse, que manejan fondos de empresas públicas de manera discrecional.
Esto, sumado al propio desgaste de la relación entre el Presidente y Posse, está creando el escenario perfecto para que el imitador de Tommy Shelby siga avanzando sobre la Jefatura y cumpliendo roles de los que antes se encargaba Posse, como la negociación por la Ley Bases, o ir más allá y controlar áreas claves, como ya hizo con la AFI.